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jueves, 15 de agosto de 2019

El calentamiento global es un problema candente


Sin ninguna duda, el calentamiento global es un problema candente. Año tras año, en todas partes se muestran evidencias de la forma como paulatinamente la temperatura de nuestro planeta ha ido aumentando poco a poco, sin que hasta ahora se haya podido hacer nada efectivo para revertir esta situación.

Cada vez el clima pareciera estar más descontrolado. En los lugares donde suele llover, llueve al punto de la inundación. En los lugares donde hay sequías, el agua escasea como nunca antes lo había hecho. Los nevados que podían avistarse completamente blancos desde las ciudades hasta hace unos pocos años, hoy en día se ven como simples montañas sin nieve.

Esto es un problema al que las personas poca o ninguna atención le prestamos. Lo cierto es que el planeta Tierra cada vez está más caliente y este incremento generalizado en la temperatura, ya ha comenzado a causar estragos que de no ser controlados, nos pondrán en jaque a los seres humanos en muy poco tiempo.


La triste realidad

Debemos reconocer una triste realidad y es la manera irresponsable como nos hemos comportado en este lugar. Las grandes fábricas en todo el mundo, arrojan cientos de miles de millones de toneladas de partículas de sustancias químicas contaminantes al aire y a las aguas día tras día. Estos químicos que provienen de toda clase de industrias han afectado y continúan afectando nuestra atmósfera. Con la afectación de la atmósfera que es la encargada de regular la temperatura del planeta, esta temperatura ha ido aumentando cada vez con más rapidez.

Si bien a nadie pareciera importarle esta situación, lo cierto es que basta tan solo un par de grados más de aumento en la temperatura a nivel general, para que la vida en el planeta pueda estar seriamente comprometida y en peligro.

Todo lo que existe en este lugar llamado Tierra, es un ecosistema que funciona de manera coordinada. Todo está enlazado y corresponde a una cadena. Si alguno de los eslabones de esa cadena falla, todo lo demás puede fallar irremediablemente.

Y en este caso, nosotros los seres humanos, somos ese eslabón en esa cadena, que desde siempre ha fallado. Pareciera ser que nuestro único objetivo en este lugar, fuera la destrucción y la contaminación de todo cuanto vemos.

¿Cuántos seres humanos pueden decir que están en peligro a causa de la naturaleza?, ¿cuántas especies animales y vegetales están en peligro a causa de los seres humanos? La diferencia es notable. La naturaleza nos acogió desde siempre en este lugar, y a cambio de ello, nos hemos empeñado ciegamente en destruirla.

Nos hemos convertido en especialistas en generar contaminación de manera indiscriminada, y esa contaminación lo está afectando todo a gran escala y de una manera alarmante.

¿Cuál es nuestra responsabilidad?

¿Cuál es nuestra responsabilidad frente a esto, y qué estamos haciendo para remediar el daño que estamos causando? La respuesta es muy sencilla. Nuestra responsabilidad es total y absoluta y casi nada es lo que hemos hecho hasta ahora para solucionar los desastres que hemos ocasionado.

La vida en este planeta tal y como la conocemos, pende de un inestable equilibrio que puede romperse en cualquier momento. Hemos devorado todos los recursos naturales que nos ha sido posible devorar, hemos contaminado todo lo que ha sido posible contaminar, y hemos creído que podemos reemplazar algo tan esencial para la vida como lo es el agua y el aire, con petróleo, con lingotes de oro, con billetes y monedas, y lo único cierto y real, es que cuando el agua y el aire se hayan acabado, no vamos a poder beber o respirar petróleo, ni lingotes de oro, ni billetes ni monedas.

El calentamiento global es una realidad que ya no está a la vuelta de unos cuantos años, sino que es un problema que ya está tocando en nuestra puerta y no sabemos qué hacer para solucionarlo.

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Los glaciares se están derritiendo, el nivel del mar está subiendo, los bosques nubosos están muriendo y la vida silvestre está luchando para mantenerse con vida en un planeta que conocieron muchos antes de que los seres humanos apareciéramos en el por primera vez.

Esta más que claro que hemos sido los seres humanos los que hemos causado el calentamiento global que comenzamos a experimentar con fuerza desde el siglo XX, al liberar gases que atrapan el calor en la atmósfera y que han sido llamados “gases de efecto invernadero”, y sus niveles son actualmente más altos ahora que en cualquier otro momento de la historia de los últimos 800.000 años de este planeta.

El calentamiento global está causando un conjunto de cambios en el clima de la Tierra que actualmente afectan de forma desmedida los ciclos biológicos y climáticos de nuestro planeta.


Esto es una emergencia

Estamos frente a una gran emergencia. El cambio climático abarca no sólo el aumento de las temperaturas medias, sino también los fenómenos meteorológicos extremos, los cambios en las poblaciones y hábitats de la vida silvestre, el aumento del nivel del mar y una serie de otros impactos inconmensurables. Todos esos cambios están surgiendo a medida que los seres humanos continuamos llenado nuestra atmósfera con gases de efecto invernadero, cambiando los ritmos del clima de los que todos los seres vivos dependemos por completo para sobrevivir.

¿Qué vamos a hacer, qué podemos hacer para frenar este calentamiento causado por el hombre? ¿Cómo vamos a hacer frente a los cambios que ya hemos puesto en marcha? Mientras luchamos por entenderlo todo, el destino de la Tierra tal como la conocemos cuelga de un frágil hilo, y pareciera ser que a nadie le importara en realidad esta compleja y delicada situación.

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